Siguiendo con los trastornos de la conducta alimentaria (TCA), pasamos a hablar sobre la Bulimia Nerviosa.
¿Qué es la Bulimia Nerviosa?
La Bulimia Nerviosa (BN) es un trastorno que se engloba dentro de los trastornos de la conducta alimentaria, el cual se caracteriza, en primer lugar, por la presencia de episodios recurrentes de atracones, los cuáles se caracterizan por (APA, 2013):
1) Ingestión, en un periodo de tiempo determinado, de una cantidad de alimentos que es claramente superior a la que la mayoría de las personas ingerirían en un período similar en circunstancias parecidas.
2) Sensación de falta de control sobre lo que se ingiere durante el episodio (por ejemplo, sensación de que no se puede dejar de comer o controlar lo que se ingiere o la cantidad de lo que se ingiere).
Pero a diferencia del trastorno por atracón, en la bulimia nerviosa van seguidos de métodos compensatorios inapropiados, como por ejemplo, vómitos provocados, uso de laxantes, ayuno, ejercicio excesivo, etc. El objetivo que tienen estos métodos compensatorios es evitar ganar peso ya que las personas que sufren bulimia nerviosa se encuentran excesivamente influenciadas por la silueta y el peso corporal.
Para que se diagnostique esta patología las conductas compensatorias deben aparecer en un promedio de dos veces a la semana durante un período de mínimo tres meses).
Según el método que se utilice para evitar ganar peso, se distinguen dos tipos: El purgativo el cual incluye la autoprovocación del vómito o el uso de laxantes. Y por otro lado el no purgativo, el cual utiliza otros tipos de conductas compensatorias como pueden ser el ejercicio excesivo o el ayuno.
Así pues la conducta de vomitar empieza siendo una práctica para eliminar el alimento ingerido pero posteriormente se convierte en un círculo vicioso en el que se pierde el control hasta el punto de sentir que se tiene que vomitar cada vez que se ingiere alimento. La persona que sufre Bulimia se siente avergonzada por esta situación creándose un estado de mal estar.
En cuanto al curso de desarrollo, la bulimia nerviosa se inicia generalmente al final de la adolescencia o al principio de la vida adulta. Los atracones suelen empezar después o durante un período de régimen dietético. (APA, 1995).
Síntomas y signos en la Bulimia Nerviosa.
-Síntomas: Irregularidades menstruales, ardor esofágico, dolor abdominal inespecífico, letargo, distensión abdominal, fatiga, cefaleas, diarrea, tumefacción de manos y pies, dolor de garganta, entre otros.
-Signos: Callosidades en las manos, hipertrofia de las glándulas salivales, erosión del esmalte dentario y caries, úlceras orales, etc.
La importancia del Tratamiento psicológico
Los objetivos fundamentales que se persiguen a la hora de tratar los trastornos de la conducta alimentaria, en este caso la Bulimia Nerviosa, serían:
- Restaurar el peso corporal.
- Tratar las complicaciones físicas.
- Mejorar la motivación del paciente para que normalice sus hábitos dietéticos y colabore en el tratamiento.
- Educar al paciente sobre nutrición saludable y patrones de alimentación adecuados.
- Abordaje de conflictos psicosociales.
- Corregir pensamientos, actitudes y sentimientos erróneos sobre su trastorno.
- Tratar las complicaciones psiquiátricas asociadas (autoestima, depresión, etc.).
- Favorecer la colaboración de la familia.
- Prevenir recaídas.
Bibliografía
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Saldaña, C. (2001). Tratamientos psicológicos eficaces para trastornos del comportamiento alimentario. Psicothema, 13(3).